El latigazo cervical es una de las lesiones más frecuentes que se padece como consecuencia de un accidente de tráfico pero también es muy común observarlo en traumatismo resultante de la práctica deportiva o simplemente después de una mala caída.
El latigazo cervical se produce por un mecanismo de aceleración y deceleración brusca sobre la región cervical. Esta fuerza provoca tensiones a lo largo de la columna vertebral.
¿Cuáles son los síntomas del latigazo cervical?
Los primeros síntomas suelen aparecer poco después de causado el traumatismo y tienden a ir aumentando con el paso el tiempo. Estos pueden ser:
- Dolor en cuello y hombros que puede irradiar hacia los brazos.
- Rigidez cervical, acompañada de contracturas musculares en la región escapular.
- Sensación de mareo, dolor de cabeza, acúfenos, dolor temporomandibular.
- Hormigueo en la cara.
- Dolor lumbar que puede desencadenar en una ciática.
Neuralgias, lumbalgias, ciáticas, cefaleas, cansancio, insomnio… pueden ser varios de los síntomas de un latigazo cervical tras un traumatismo.
Es importante descartar cualquier otra lesión como fracturas, luxaciones vertebrales, hemorragias, etc. Por este motivo es primordial acudir a urgencias o a su médico lo antes posible.
Tratamiento y recuperación del latigazo cervical
Pasado unos días es recomendable empezar con la fisioterapia. El objetivo será disminuir el dolor y recuperar la movilidad biomecánica funcional del raquis anterior al traumatismo.